En el diario El País al pobre boss le han hecho ‘un Sabina’ y me sabe mal. Los perpetradores han sido los muy prestigiosos críticos Diego A. Manrique y Fernando Navarro y, concretamente en el caso de este último, la crítica -larguísima- es casi un ajuste de cuentas y, a no ser que Springsteen haya dicho algo bueno de Donald Trump, no entiendo la inquina.

El crimen ha sido que Bruce se ha metido en su estudio casero con Ron Aniello (y poca gente más, por lo que se ve en los créditos: Aniello toca todos los instrumentos excepto vientos y cuerdas) y probablemente se lo han pasado pipa grabando 15 temas clásicos de soul (Four Tops, Gladys Knight, Temptations, Aretha Franklin, The Walker Brothers…) que han dado lugar a un disco-desahogo, resultón y bastante intrascendente que, por lo leído, no se le puede permitir a un hombre de 73 años que no tiene que demostrar absolutamente nada a estas alturas de su carrera.

(playlist con las canciones del disco precedidas por los temas originales)

El disco, ya digo, no está nada mal; es una curiosidad, una frivolidad, un lujo caro y -creo que lamentablemente para Springsteen por el tufo de las críticas- resulta que es divertido, entretenido y contiene además tres o cuatro cortes de notable alto (el que da el título al álbum, ‘Turn Back The Hands Of Time’ o ‘The Sun Ain’t Gonna Shine Anymore’) y esos rasgos felices que destila ‘Only the Strong Survive’ es precisamente lo que personalmente yo más valoro, porque -tengo que decirlo- el boss me ha aburrido mucho-mucho en los últimos 20 años. Y tengo además la improbable teoría de que con el 11-S a este se le fue la olla (‘The Rising’, de 2004, se puede leer como el reconocimiento de Springsteen de ser incapaz de entender el mundo y la maldad que lo habita) y desde entonces ha ido encadenando elepés alimenticios, desgarbados y tediosos, quizá con la excepción de uno de los últimos, ‘Letter To You’, que estaba muy bien.

Así que como compensación a tanta confusión, hastío y tristeza, bien está que ese pobre viejo de Nueva Jersey se de una buena fiesta.

por El Poleo