De la pata de Prince, nieta de Stevie Wonder y del sonido Motown, sobrina carnal de Marvin Gaye y la hermana pequeña espabilada que no pudo salirle a Michael Jackson, ha vuelto la imparable Janelle Monae con su nuevo disco, ‘The Electric Lady’, continuación del verdaderamente asombroso ‘The ArchAndroid’.
El disco, que contiene las suites IV y V (parece que quedan otras dos) de la historia de Cindy Mayweather, un androide mesiánico del siglo XXVIII, ha sido confeccionado mirando menos El Concepto y con muchos guiños al público generalista; y cuenta además con una lista de invitados que, por sí sola, ya es un reclamo: Prince, Erykkah Badu, Solange Knowles, Miguel y Esperanza Spalding.
‘The Electric Lady’ es un disco maduro, brillante, culto y divertido, poco ambicioso (y no pasa nada, eh) en lo creativo y con una producción exquisita. La misma exquisitez que muestra Janelle en sus directos, como pudimos comprobar este verano en el MEO Sudoeste, de Portugal, y es que parece que a la señorita Monae nadie le ha ofrecido un bolo este verano en España: será por la dificultad de encontrar alguien que se suba al escenario después de que ella se baje.