Sampha Sisay es un joven músico británico de 28 años que presenta ahora su primer disco demostrando que en esto del triunfo se puede hacer el camino al revés, si bien pasar primero por el estado de compositor/arreglista/productor para otros (Solange, Frank Ocean, Drake o el omnipresente Kanye West) para acabar haciendo uno su propio bollo tampoco es que sea una ruta demasiado rara.
Basta escuchar un par de temas de este excelente ‘Process’ para establecer similitudes con el sonido de James Blake y por eso rápidamente se le quiso poner a Sampha la etiqueta de ‘sucesor de’, pero lo cierto es que tanto Blake como él proceden de la misma cantera del post-dubstep y utilizan los mismos palos, solo que Blake se adelantó o lo tocó primero la varita de la fortuna.
Y lo cierto es que ambos artistas trabajan el mismo género, que se decía antes: el ya mencionado dubstep junto al hip hop y el modern r’n’b crean las bases, que son trufadas con samples y, por encima, los arpegios electrónicos tejen la superficie sonora sobre la que flota un soul vaporoso que sale de una voz insegura. Y funciona que lo flipas.