‘Upright’, una miniserie australiana (muy australiana) emitida en España por Movistar/Sundance, viene a ser una road-movie canónica perfectamente disfrutable tanto por el camino y sus peripecias como por el progresivo conocimiento que vamos adquiriendo de los protagonistas y de sus circunstancias. Cuenta la ruta que emprende desde Sidney hasta Perth de un rockero fracasado (no solo como músico, como descubriremos) al que acaba recogiendo (junto con su equipaje, un piano vertical, de ahí el título) una adolescente que conduce una camioneta veinte veces más grande que ella y que esconde -la adolescente- una vivencia todavía más tremenda que la del rockero.
Pero lo mejor de la función (en ocho breves capítulos a la manera de ‘The End of the F***ing World’) es que no hay dramón, sino bastante comedia (algo agria), unos agradables brochazos de surrealismo australiano, muchos personajes ‘de carretera’ y una buena cantidad de música entre la que se entreveran algunos nombres de las antípodas, como INXS, Briggs, Chantoozies, Grinspoon, Baker Boy, The Living End o Tame Impala, unos más conocidos que otros a este otro lado de la bola, como estaréis comprobando.
La compenetración entre los dos actores, ella, Milly Alcock, demasiado joven para llevar tanta carga, él, Tim Minchin, demasiado viejo para poder soltarla, es sin duda el otro plato fuerte de esta ficción, donde además Minchin le da una buena vuelta a ese personaje de rockero fracasado (o, peor, estrella de rock frustrada) que ya exploró en ‘Dark Side’, su comedia musical de un solo actor.