Skyway Man es el nombre de superhéroe de un oscuro -por desconocido- artista de California asentado en Nashville, más o menos en la órbita de Matthew E. White, llamado James Wallace y ya autor de otro disco en 2017 del que por supuesto no habíamos oído hablar. Wallace/Skyway Man sacó su álbum en enero, fue muy bien recibido (sería porque a esas alturas del año no hay mucha chicha para los críticos) y simplemente no pasó nada más, al menos que sepamos.
Y el caso es que este ‘World Only Ends When You Die’ es un disco entre muy bueno y excepcional y, además, concurren las circunstancias de que es rarito, un pelín desvariado, otro pelín amargo y notablemente adictivo, porque es muy difícil que escuches solo una vez esta alucinada (pero contenida y encauzada) mezcla de americana, góspel, pop, funky, rock, soul, blues y hasta calypso y psicodelia.
Si Wallace es el chef de esta comilona, no hay que dejar de nombrar a su brigada de cocina, la Spacebomb House Band, por un lado, que aporta vientos y cuerdas, y las radiantes voces del dúo de Nueva Orleans The Lostines. Un equipo que da cuerpo y alma a la especie de ópera psicofolk que Skyway Man tenía en la cabeza acerca de experiencias cercanas a la muerte y sus consecuentes reflexiones religiosas y filosóficas. Un plato no precisamente fácil de servir y que sin embargo llega a nosotros con la exacta ligereza que permite disfrutar de todos sus matices sin saciarnos y antes lo contrario.
Un disco para dejarse llevar, que busca de forma muy inteligente la complicidad de un oyente abierto a muchas sorpresas y ciertos jugosos desvaríos que son un festín.