Darío Buñuel

Nuestro amigo y ya colaborador habitual del Poleo Griffin Jazz nos presenta hoy a una banda que destacó notablemente en la última edición de nuestro concurso de bandas y a su ‘voz cantante’, Darío Buñuel, quien a su vez nos presenta su primer trabajo en solitario y hace unas más que sinceras y sensatas afirmaciones sobre cómo está el patio de rock en España, y no precisamente por culpa de la pandemia.

Sin armar mucho ruido ni levantar excesivo polvo, los madrileños Red Apple, power trio formado por Darío Apple (voz, guitarra), Isabel Wash (voz, bajo) y Javier García (batería), aunque casi habría que añadir como cuarto miembro al productor Miguel Lorenzo, se colaron en la final del recientemente celebrado concurso de bandas del festival Suberock de este año para nuestro gozo. Hemos de confesar que no estaban entre los nombres que circulaban como favoritos a priori, porque pese a su ya dilatada trayectoria, no es una banda habitual en este tipo de eventos y su último trabajo, el sensacional “Thus Spoke Zarathustra”, quedó muy lejos de obtener la difusión y el revuelo mediático (aunque sea en prensa especializada, si es que eso sigue existiendo en este país) que se merecía. Y esta es en esencia la biografía de una banda como Red Apple, que es la misma que la de decenas de bandas de rock en este país; actitud, arrojo, talento e incansable esfuerzo para mantener erguida la bandera del rock and roll en un panorama cada vez menos favorable. Y un público no sé si escaso, pero desde luego fiel y agradecido, por supuesto, todo hay que decirlo.

Cinco discos han publicado entre 2011 y 2018, autoeditados o con la colaboración de francotiradores como de Delia Records, Nooirax Producciones o su propio sello Gaekerena Records. En “Ouroboros” (2013) o “Pow Now” (2016) se suceden riffs enérgicos, hard rock y stoner, pero también country rock y blues rock eléctrico, todo ello con un aroma muy 70s, cuando las guitarras sonaban más rabiosas y el formato power trio proponía un sonido crudo, directo y carente de complejos. Y con referencias evidentes del calibre de Black Sabbath, Groundhogs o Hound Dog Taylor & The Houserockers.

En 2018 apuestan fuerte y publican su obra más ambiciosa, “Thus Spoke Zarathustra”, por primera vez en vinilo. Darío Buñuel, un estudioso de la obra de Nietzsche, adapta textos propios de sus trabajos analizando la obra del filósofo alemán y los ofrece en clave de rock and roll. Muy lejos de ser un disco experimental, se trata de una obra muy coherente con el resto de su discografía; con hard rock, country rock, blues rural, sonidos pantanosos, algo de psicodelia, pero todo extremadamente dinámico y asimilable para cualquier rocker con las orejas despiertas y gourmets selectos.

Como a todo el mundo, a Red Apple le llegó la pandemia y echó por tierra todos sus proyectos e ilusiones. Pero haciendo de la falta una virtud, Darío Apple buscó inspiración y creatividad en la realidad que nos rodeaba y escribió un paquete de composiciones refugiándose en el roots americano, en la raíces, en el folk, en Hank Williams, el blues rural y en Bob Dylan. Añadiendo unas cuantas versiones (incluyendo un precioso homenaje a Justin Townes Earle), grabó recientemente “Songs I Wrote While I Was Writing Songs” de la mano del productor Miguel Lorenzo y lo editó digitalmente.

Le hemos pedido a Darío (agradeciéndole enormemente su descarnada sinceridad) que nos presente el disco en primera persona y en exclusiva para Extremasound; qué ha supuesto esta crisis para un músico, cómo se pasa de una ópera rock a un disco acústico, en definitiva qué se le pasa a la cabeza a un músico qué tiene tantas dificultades añadidas para difundir y dar a conocer su obra. Y que también sirva esto de testimonio y de homenaje a tantos incansables songwriters que nos regalan muy buenas discos con tanta frecuencia en este país y que se merecen toda nuestra atención.

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Hola a todos, soy Darío Buñuel y los amigos de Extremasound me han invitado a presentaros mi nuevo disco, “Songs I Wrote While I Was Writing Songs”, publicado hace unos días. Se me hacía extraño haber sacado un disco y no hablar de ello con nadie, tampoco está fácil la cosa para verse, y yo no tengo un pavo para promoción así que voy a escribir un poco lo que quiera y espero que a alguien le interese. Puedo empezar hablando de algunas de las versiones que tiene el disco para que se entienda mejor el conjunto.

Este disco contiene una versión de Mose Allison que se llama “It Didn’t Turn Out That Way”. Amo a Mose Allison y elegí esa canción en concreto porque me siento muy identificado con ella, me veo como el tipo del que habla Mose ahí, como si cada día entendiese mejor una letra que ya me agarró desde el principio. Nada ha salido como debía, tenía buenas cartas, supongo, y por algún motivo todo se ha torcido, puedo culpar a las crisis económicas que me está tocando vivir pero también intuyo que buena parte es culpa mía. Este disco recoge muchos de mis fracasos de los últimos 8 años, de los más traumáticos a los más cómicos. El único golpe que he sido capaz de devolverle a la vida por ahora son unas cuantas canciones, las de Red Apple y estas. Eso me recuerda a otra de las versiones, “Do You Think You Hit Bottom” de Malvina Reynolds que dice: “There’s the nightmare kind where you fall and fall, and you wake to find you haven’t been dreaming at all”, maldita Malvina, cuánta razón tenía, me pregunto si Mose y Malvina la liaron tanto como yo de manera tan estúpida, no hay una manera objetiva de medir eso supongo.

Nada ha salido como debía, tenía buenas cartas, supongo, y por algún motivo todo se ha torcido, puedo culpar a las crisis económicas que me está tocando vivir pero también intuyo que buena parte es culpa mía

“Songs I Wrote While I Was Writing Songs” son temas que por su carácter folk/country/llámalo X no encajaban en Red Apple (porque mi labor principal es componer para Red Apple) y se quedaban siempre a medias, como chistes privados que me contaba solo a mí mismo de vez en cuando. Nunca he encontrado manera de compartirlas con nadie, nunca se han tocado en directo en un bolo de “Darío Buñuel”, creo que no tendría sentido en este contexto en el que vivo (aunque tampoco Red Apple tiene sentido y ahí estamos).

Darío BuñuelCon esto del confinamiento pandémico tenía tiempo para cerrar los temas, componer alguno más y hacer algo que pareciese un repertorio. ¿Para qué? Pues en realidad solo para salvarlas en algún lugar porque como digo no sé dónde coño podría yo tocar esto y que a alguien le importe una mierda. Tengo la suerte de contar con la ayuda de Miguel Lorenzo como amigo y técnico de sonido. Nos ha grabado cuatro discos a los Red Apple, y una tarde en su buhardilla grabé estos temas prácticamente de corrido con él. No tenía sentido buscar la perfección en la grabación porque yo tampoco los tengo muy trabajados, digamos que yo me sigo sintiendo fuera de mi terreno en este formato. Así que asumimos muchas imperfecciones, algunos desafines, fallos de guitarra, incluso ruidos de ambiente que se cuelan en algún momento, lo que viene siendo la vida.

aquello que no se puede decir porque es demasiado fuerte o penoso o vergonzoso o terrible pues se canta, y no sería capaz de escribirlo aquí en prosa sin sentirme como un gilipollas

Me cuesta hablar de música ahora mismo y no ser un cenizo. Es difícil con el bombardeo de mierda al que nos someten los medios. Creo que en muchas de estas canciones hay un tono irónico que asume con humor lo mal que va todo o lo mal que me sale a mí todo. Si “lo personal es político” estos temas son pura canción-protesta.  No consigo entrar en materia y  hablar de lo que hablan las canciones, una especie de pudor me lo impide. Por eso hace uno canciones o al menos para eso lo hago yo, aquello que no se puede decir porque es demasiado fuerte o penoso o vergonzoso o terrible pues se canta, y no sería capaz de escribirlo aquí en prosa sin sentirme como un gilipollas o un desgraciado. Sucede lo mismo si un amigo te dice “Hey tío, todo lo que necesitas es amor” pues le sueltas una hostia, pero si te lo cantan los Beatles te parece que tiene todo el sentido del mundo.

Lo habitual como “artista” cuando presenta un trabajo nuevo es hacerse el guay y contar cosas estupendas y positivas y lo bien que te va la vida, pero si no os importa estoy un poco hasta los cojones de propaganda y bazofia y promoción, si habéis llegado hasta aquí voy a pasar a hablar como si hablase con un colega, me disculpáis si resulto negativo pero lo hago desde la honestidad que uno se permite con un amigo.

Yo no siento más que una sensación de sin sentido, extrañeza e incertidumbre absoluta en este momento, supongo que no soy el único. Los Red Apple vamos a intentar grabar el próximo disco, la puta pandemia nos ha retrasado más de un año ya. Lo mismo: para intentar salvar unos temas que vaya Dios a saber cuándo se podrán tocar en directo, si es que lo conseguimos algún día. Con el disco anterior ya nos costó dar algún que otro bolo medio digno. Y esto me lleva a la reflexión que he compartido últimamente con otros amigos músicos con la que me gustaría acabar.

todo es mentira porque básicamente no existe ningún público, los grupos tocan en salas vacías o para sus amigos, en horarios en los que a esas salas no va nadie jamás

Para nosotros la pandemia ha tenido un efecto curioso, nos ha liberado de la presión de tener que dar conciertos para aparentar que el grupo existe y está vivo. Era todo una pantomima absurda como en general toda la escena “underground” o “alternativa” porque nadie va a los bolos nunca. Todos hacíamos como que tocábamos, como que había algún sello discográfico alternativo, alguna sala en la que tocar… pero todo es mentira porque básicamente no existe ningún público. Los grupos tocan en salas vacías o para sus amigos, en horarios en los que a esas salas no va nadie jamás. Cuando empieza a llegar el público a las salas los músicos estamos recogiendo nuestro equipo y pirándonos.  Todos somos mayores y sabemos ya que el “público” o la “demanda” de casi cualquier cosa (pienso en música pero también en política) no existe, se crea según las necesidades del mercado capitalista. Y una cosa está clara, ahora mismo, por lo que sea, no quieren grupos auto-organizados y horizontales de gente que compone sus propias canciones, y tampoco quieren ninguna canción que pueda explorar por un instante otro estado anímico que no sea el bailoteo y el postureo.

Me gustaría contaros otra cosa pero esto es lo que puedo contaros. Espero que os apetezca echarle una oreja a este disco y a los de Red Apple si no los conocéis, todos están en Spoti y plataformas similares, y si algún pirado quiere alguno en formato físico no tiene más que contactarnos por Facebook o Instagram o lo que sea y se lo enviamos. Este va a editarse en cassette gracias a la buena gente de Retroresourcal Records, el Zaratustra de Red Apple está en doble vinilo y todos los demás en CD.

Un abrazo y muchas gracias por leerme.

por El Poleo